El Orgasmo y su falso mundo

¿Fingir un orgasmo? ¿Por qué no gozar de verdad?

                Comenzaremos por buscar un definición, ¿Qué es un orgasmo? Técnicamente es una respuesta fisiológica, emocional y social. En castellano y para que se entienda fácil, un orgasmo es un flujo de sensaciones excitantes y explosivas, las que más, que recorren nuestro cuerpo haciéndonos vivir el placer puro y al límite. Esta ola sensual está continuado siempre por un periodo de relajación, de satisfacción y de sosiego. Benditas sensaciones.

                Mi pregunta para la comunidad y que me gustaría debatir con todos vosotros es la siguiente, a pesar de que las mujeres en general poseen las capacidades físicas y emocionales intactas llegar a un orgasmo deciden fingir ¡¿Por qué!? Vayamos por partes. Decir de forma rotunda que para mi la interpretación y los papeles debemos dejarlos para los actores y actrices, para que le den uso en teatros, cines, series o cualquier sitio habilitado para interpretar. Y es que un estudio revela que aproximadamente un 25% afirmaron que emitían gemidos y verbalizaciones durante casi toda la relación sexual y un 50% durante partes del momento. Se consultó el motivo por el que necesitaban emitir gemidos y expresiones de placer, viene lo impactante aunque no sorprende a estas alturas, el 90% de las encuestadas lo hacían para aumentan la autoestima de la pareja, y un 50% agregó además motivos como: dolor durante el coito, cansancio, aburrimiento y apuro por escasez de tiempo. Eso sí se obtuvo con un 68% que a pesar de no llegar a un orgasmo real con sus parejas no dejarían a sus parejas por ello.

                Son datos preocupantes, pero tanto para las mujeres como los hombres, porque las mujeres fingiendo lo que fomentan es una relación sexual falsa, nos perjudicaríamos a nosotras mismas ya que no estaríamos viviendo el orgasmo  y para los hombres porque habrá quien desee que su chica lo viva de verdad, queriendo de este modo encontrar el camino para ayudarla.

                Esta vez quiero lanzar un grito al cielo, ¡basta de fingir! Por nosotras, por ellos, por el bien de las relaciones sexuales, por el amor. Parte de culpa de que se finja tanto es porque en la sociedad está inculcado de que si no se llega al orgasmo ha sido un fracaso o está incompleta la relación, esto es un gran error. El orgasmo es una parte más, que no por no llegar a él quiere decir que todo lo anterior no haya sido disfrutado, las sensaciones igualmente se experimentaron y sintieron.

                A continuación aportaré, desde mi experiencia y conocimiento, breves consejos para lograr llegar o al menos enfocar adecuadamente el camino para facilitar uno de ellos.

- Imprescindible disponer de tiempo suficiente para crear el clímax y el encuentro sexual. No a las prisas, aunque pueden funcionar para romper la rutina.

- Los previos con juegos, susurro, charlas ayudan a crear relajación y a comenzar con la lubricación.

- No nos ceguemos con que el único modo de conseguir un orgasmo es mediante la penetración, no cerremos puertas al oral o juguetes eróticos. Dejemos que nuestra pareja use la boca, las manos, un vibrador, o lo que surja de la imaginación.

- Masturbarse, acariciar, masajear durante la relación ya sea con las manos o un vibrador, por ejemplo, son variantes muy recomendables.

- Importante, pide lo que te gusta o necesitas para llegar al placer, fundamental la comunicación, transmitir a nuestra pareja si algo funciona o no.

- No intentemos dejar de lado el complacernos por satisfacer a nuestra pareja. La relación es cosa de dos, y para los dos. Ninguno tiene prioridad.

Después de estas pequeñas pautas a seguir, con ganas y predisposición de pasarlo bien, será mucho más fácil lograr un deseado e intenso orgasmo. Pero recordad siempre orgasmo real, dejemos el fingir. El orgasmo debe ser cosa de dos y disfrutando solamente tú y yo...

**Consejo para los hombres, no os obsesionéis, buscad la complicidad con la chica, preguntad y hacerle sentir bien, cómoda, agusto, no os precipitéis y seguro que de este modo, aunque no lleguen a un orgasmo, estarán satisfechas y felices por haber vivido un buen rato, donde se sintieron atendidas y cuidadas.